Cantares 3:1-5 El ensueño de la esposa (La novia)
Meditemos en el libro de Cantares 3:1-5. Aquí se nos habla del ensueño de la esposa, quien busca a su amado, según nos dice Cantares 3:1 “Por las noches busqué en mi lecho al que ama mi alma, lo busqué, y no lo hallé”. Consideremos la solicitud del amor de la esposa por el esposo.
Se ha dicho insistentemente que la mujer es más sensible al amor que el varón. La mujer se entrega más entre tanto que el varón es rígido y poco sensitivo, aunque hay por supuesto algunas excepciones.
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El pasaje leído, Cantares 3:1-5, solo nos lleva a considerar la magnitud del amor de la esposa por su esposo, su solicitud, su entrega, su nostalgia y por su puesto su búsqueda hasta encontrarlo.
El ensueño de la esposa, significado bíblico
Por las noches busqué en mi lecho al que ama mi alma (Versículo 1)
Este pasaje sobre el ensueño de la esposa puede ser considerado, por la característica de su lenguaje, como un sueño de la esposa que anhela siempre la dulce compañía de su esposo. “Por la noche busqué en mi lecho al que ama mi alma», el amor de mi alma.
Cuando el amor de la esposa cobra mayor inspiración, esta expresa su solicitud, su entrega, su nostalgia, el anhelo de estar en la compañía de su cónyuge y no haya paz hasta buscarlo y encontrarlo, para satisfacer ese precioso sentimiento de amor que la une a su esposo. Esto tiene algunas implicaciones, veamos algunas.
Cuando la esposa ama entrañablemente al esposo:
1. Manifiesta su solicitud por él.
2. Siente la necesidad de su compañía
3. Piensa preocupadamente en él
4. Lo busca hasta encontrarlo
5. Anhela disfrutar siempre de su presencia y compañerismo
6. Se satisface, satisfaciéndole en todo
7. Se recrea en su amor siempre.
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Tomando en cuenta todo esto, son justas y razonables las palabras del proverbista cuando dice: “El que haya esposa, haya el bien y alcanza la benevolencia de Jehová” (Prov. 18:22). Lo que quiere decir que el hombre como esposo se siente feliz, cuando goza de la compañía de una esposa que lo ama y que se muestra siempre enamorada.
Ella busca a su esposo
El ensueño de la esposa y la búsqueda del que ama su alma
Muchos eruditos piensan que la muchacha recordó un sueño que hizo que se preocupara por el paradero de su amado. Tanta fue su preocupación que se levantó a buscarlo. Esta búsqueda de la esposa (Novia), podemos notarlo mediante afirmaciones que se hacen en el pasaje:
Me levantaré
Recorreré la ciudad
Por las calles y plazas
Buscaré al que ama mi alma (verso 2)
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Expresiones que revelan el amor
Todas estas expresiones revelan el amor de la esposa, su intriga por disfrutar de la compañía de su amado. No hay sosiego para el amor hasta que éste cumple su deseo. Lo busqué; mas no lo hallé, aunque pasiva es tal expresión, no culmina ahí, sino que continúa esa búsqueda hasta lograr encontrarlo.
El amor de esta esposa por su esposo, causó intranquilidad, a tal grado que no importó las horas de la noche, el ser vista por los guardias de la ciudad, el sufrir la intemperie de la oscuridad y el ser víctima de los males que asechan en las tinieblas de la noche, solo le importó encontrar a su amado y esto a cualquier costo y a pesar de todo.
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¿Qué más aprendemos del ensueño de la esposa?
¿Qué conclusiones podemos sacar de esto?
1. No se puede resistir al amor
2. No existen barreras que lo impidan
3. Nada lo hacen ceder atrás
4. Desafía los peligros
5. Triunfa sobre todo
Considérese todo esto a la luz de la experiencia de amor entre Isaac y Rebeca (Génesis 24); Jacob Y Raquel (Génesis 29), y contrástese esto último con la experiencia de pasión entre Amnón y Tamar (2 Samuel 13)
El amor busca satisfacer a dos para hacer un hogar, la pasión solo busca satisfacción para uno y destrucción de los dos.
Encontrando lo que buscaba
Hallé luego al que ama mi alma
El versículo 4 de nuestro texto de estudio dice literalmente: “Apenas me aparté de ellos un poco (Guardia de la ciudad), hallé luego al que ama mi alma, a así de él, y no lo dejé, hasta llevarlo a casa de mi madre, a la habitación de quien me dio a luz”
El ensueño de la esposa nos enseña que el amor logra sus propósitos
El verdadero amor logra sus propósitos. La inspiración de este canto expresado en este pasaje 3: 1-5 halla cabida en la experiencia del amor de muchas parejas, y en particular, en esposas que saben amar a sus esposos y que sienten la añoranza de su cónyuge cuando estos están en sus trabajos o lejos del hogar.
En el ensueño de la esposa, vemos su solicitud por el esposo, su entrega, la nostalgia que embarga su corazón y finalmente ese deseo de disfrutar de su compañía. En el pasaje que hemos estudiado hoy nos damos cuenta que esta mujer halló lo que buscaba, porque estaba ceñida de amor por su esposo.
Conclusión sobre el ensueño de la esposa en Cantares 3:1-5:
Además de todo lo mencionado anteriormente, el ensueño de la esposa, también nos enseña sobre nuestro amor y deseo por la presencia de Dios. ¿Cuántas veces nos hemos despertado con ese deseo de sentir en nosotros al que ama nuestra alma?. Sentir a Jesucristo, quien dio su vida por nosotros.
Podemos despertar a media noche, pero ¿Cuántas veces hemos sentido el deseo de derramar nuestra alma buscando la presencia de Dios hasta encontrarlo?. Busquemos con amor y pasión la presencia de Dios.
Una sola cosa es necesaria en la vida para ser feliz y es “amar”, ama a Dios sobre todas las cosa, a tu prójimo, comenzando por tu cónyuge, tus hijos, tus padres, parientes, amigos y aún a los que te aborrecen. Bendiciones en el nombre de Jesús.