ESTUDIO BÍBLICO DEL AYUNO, ISAÍAS 58:5-11, EXPLICACIÓN, ENSEÑANZA
El ayuno, estudio bíblico (Mateo 6:16-18;9:14-17), enseñanza
El ayuno es una de las fuerzas más poderosas y efectivas que podemos emplear en contra del enemigo. El ayuno solidifica la vida del cristianismo en una fructífera y de productividad. Las recompensas que acompañan el ayuno son numerosas, solo unas cuantas podremos cubrir en este artículo.
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Una meta de este estudio bíblico sobre el ayuno es señalar la importancia, efectividad y esencialidad del ayuno. Material bíblico y ejemplar práctico nos refuerzan la necesidad de hacer del ayuno una práctica. Muchas cosas son alcanzadas a través del ayuno que no se pueden lograr por nada más. Victorias son ganadas, poder es recibido y liberaciones realizadas a través de este medio.
La caída del hombre vino cuando él comió del fruto del árbol de la ciencia del bien y del mal (Génesis 3:6). El hombre fue hundido en el pecado por causa de este acto de desobediencia y hasta este día sus influencias han caído sobre nosotros.
Extraño es que el hombre cayera a través del comer, una reacción natural a la sensación inconsciente, instintiva e innata del hambre. Extraña aun es la conexión entre el comer y beber excesivo y el desenfreno del hombre en pecar.
Los días de Noé estaban llenos del comer, beber y otros vicios, de tal manera, hasta que el diluvió se los llevó (Mateo 24:36-39). Uno de los problemas de ceguera de Sodoma y Gomorra, juntamente con las prácticas inmorales, fue la de la saciedad de pan (Ezequiel 16:49).
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Pablo descubrió la trampa de Israel en que ellos se sentaron a comer y a beber y se levantaron a jugar (1 Corintios 10:7). Pablo previno que si no hay resurrección entonces comamos y bebamos pues mañana moriremos (1 Corintios 15:32).
Debemos renovar la disciplina del ayuno en nuestras vidas
Tenga la seguridad de que sí hay una resurrección de los muertos, de modo que sirve guardarnos contra los excesos del día de Noé y Lot. Por la enseñanza de Cristo parece que la historia es destinada a repetirse en esta área (Lucas 17:26-29). A luz de esto, y concluyo que el ayuno es esencial para nosotros poder templar nuestros legítimos deseos. Simultáneamente seremos investidos de poder cuando ayunamos.
Ciertamente nadie condenará la práctica legítima de comer y beber. El problema es que el exceso abunda debido a la falta de la disciplina del ayuno. Que mediante este artículo, Dios pueda poner el sentir de renovar la disciplina del ayuno en nuestras vidas.
LA RESPUESTA DE JESÚS SOBRE EL AYUNO
Jesús es cuestionado por los discípulos de Juan el Bautista concerniente al ayuno (Mateo 9:14-17). Los discípulos de Juan preguntaron por qué ellos tenían que ayunar mientras que los discípulos de Jesús no tenían que hacerlo. Jesús les contestó con tres verdades que nosotros necesitamos entender:
1) Los que están de bodas no ayunan mientras el esposo está con ellos.
2) Un remiendo de paño nuevo no se pone en un vestido viejo
3) El vino nuevo no se pone en odres viejos
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Jesucristo era y es el esposo. Mientras él estuvo aquí en la tierra con sus discípulos no fue necesario que ellos ayunaran, pero después que él ascendió al cielo llegó a ser necesario para ellos ayunar.
Jesús ha ascendido a las alturas, ahora nosotros esperamos el regreso del esposo por su iglesia, la cual Él se llevará al cielo para que esté con Él (1 Tesalonicenses 4:13-18). Su Espíritu, el Espíritu Santo, vivificará nuestros cuerpos mortales para ser levantados (Romanos 8:11).
Jesús tuvo que irse antes de que el Espíritu Santo pudiera venir a nuestras vidas (Juan 14:26; 16:7-13), pero tal experiencia poderosa no podía ser contenida en vestidos y odres viejos. El Espíritu Santo, acompañado por la oración y el ayuno, necesitaba vasos renovados, regenerados los cuales Él provee ahora. Mientras esperamos el regreso del esposo debemos mantener nuestros vasos y lámparas llenas (Mateo 25:1-13) y esto solo puede ser alcanzado a través del ayuno y otras disciplinas bíblicas.
UNA MIRADA AL AYUNO A TRAVÉS DEL TIEMPO
Con relación a la pregunta de los discípulos de Juan el Bautista, a continuación observemos lo que ha sido el ayuno desde el Antiguo Testamento hasta la actualidad e incluso el reino de mil años de Cristo.
El ayuno en el Antiguo Testamento hasta Juan el Bautista
El ayuno fue una práctica común durante todo el Antiguo Testamento. Por esto los discípulos de Juan el Bautista no pudieron entender por qué los discípulos de Jesús no ayunaban.
El ayuno durante los tiempos de Jesús
Jesús, el esposo, estaba presente con ellos, por lo tanto, NO era necesario para ellos ayunar en este tiempo. Esto fue solo por un corto tiempo.
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El ayuno en la edad de la iglesia
El esposo se ha ido, así que se nos ha ordenado ayunar en el Nuevo Testamento.
El ayuno en el Milenio
El esposa estará con nosotros, así que no tendremos que ayunar en este tiempo. Además, la iglesia tendrá un cuerpo transformado. Los salvos de Israel No tendrán que ayunar porque el esposo estará con ellos.
¿QUÉ ES EL AYUNO SEGÚN LA BIBLIA?
Muchas definiciones sobre el ayuno pueden ser encontradas, pero la siguiente deberá ser suficiente para definir lo que es el ayuno:
1) El diccionario declara que ayunar es abstenerse de comer toda o ciertas clases de comida, comer muy poco o nada.
2) Ayunar viene de la palabra Hebrea TSUWM, que significa cubrirse la boca para ayunar.
3) La palabra griega para ayunar es NESTIS, que significa no comer, abstenerse de comida.
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Es importante mencionar que ayunar NO es:
1) Un proceso de dieta
2) Perder una comida o dos porque estamos muy atareados para comer
3) Estar sin comida porque somos muy pobres para comprarla
4) Una huelga de hambre para conseguir que alguien o el gobierno haga algo
5) Un acto para obtener salud física. Aunque el ayuno es saludable, ayunamos por otras razones; esto es un beneficio secundario.
Ayunar es:
1) Una declaración mental y vocal de abstenerse de comida a fin de alcanzar fortaleza espiritual, respuestas y dirección para nosotros mismos y para otros.
2) Ayunar puede y sí ayuda para recibir el Espíritu Santo (Hechos 10:1-48)
3) Ciertos tipos de demonios no pueden ser echados fuera sino con ayuno y oración (Marcos 9:14-19)
4) Nuestro ayuno debe ser hecho ante Dios (Zacarías 7:5; Mateo 6:18)
5) El ayuno ayudó a Daniel y sus compañeros a obtener habilidades, entendimiento y sabiduría (Daniel 9:2-3; 21-22).
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NUESTRA RESPONSABILIDAD DE AYUNAR
El ayuno puede ser alcanzado a través de dos métodos en nuestras vidas. Sea cual sea el método, lo ideal es siempre tratar de ayunar.
1) Ayunar por inspiración
El Espíritu Santo nos impulsa a ayunar por alguna necesidad desconocida a nosotros en el momento, solo sentimos una carga, necesidad o deseo de ayunar. Esta es la forma más fácil de ayunar porque tenemos un fuerte sentir de hacerlo. Sin embargo, no debemos depender completamente de este método. Si así lo hacemos, nuestras temporadas de inspiración pueden presentarse muy distanciadas.
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2) Ayunar por compromiso
La dedicación y consagración a Dios demanda que ayunemos simplemente porque hemos sido mandados a hacerlo. Las disciplinas espirituales no pueden ser llevadas a cabo en la vida del creyente solo por inspiración. El auto-control es un punto esencial para el cristiano; esto es así especialmente en el llamado a ayunar. Regúlese a usted mismo a ayunar y ayune cuando su líder le pida que así lo haga. No espere en otros; haga sus propios compromisos y guárdelos. Le esperan bendiciones cualquiera que sea el método que lo motive a ayunar.
EJEMPLOS DE AYUNO EN LA BIBLIA
Añada a estas experiencias personales, experiencias de otros y otros ejemplos de ayunos en la Biblia.
1) Moisés: Ayunó 40 días en el Sinaí (Deuteronomio 9:9)
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2) David: Humilló su alma a través del ayuno (2 Samuel 12:16: Salmo 35:13; 69:10;109:24)
3) Elías: Ayunó cuarenta días (1 Reyes 19:8)
4) Esdras: Otros ayunaron por él para protección y guía en su regreso de Persia a Israel (Esdras 8:21-23). Él ayunó sin pan ni agua por los pecados de Israel.
5) Nehemías: Lloró, hizo duelo y ayunó por el muro de Jerusalén que estaba derribado (Nehemías 1:4)
6) Israel: En muchas ocasiones los israelitas ayunaron nacionalmente (Nehemías 9:1-3)
7) Nínive: El rey, los animales y ciudadanos ayunaron sin comida ni agua (Jonás 3:1-10)
8) Daniel: Mientras confesaba a Dios durante un ayuno, Dios le dio la visión de las setenta semanas (Daniel 9:24-27). Durante un ayuno de 21 días (Daniel 10:1-21), el príncipe de Persia impidió al ángel que viniera con la respuesta. Estudie este evento estrechamente, usted entenderá mejor las luchas que sostiene en oración y ayuno.
9) Ana: Servía a Dios con ayuno y oración día y noche (Lucas 2:36-37).
10) Jesús: Ayunó cuarenta días (Mateo 4:1-11). Note que Jesús venció a Satanás con el poder de la palabra.
11) Cornelio: Ayunó cuatro días, Pedro vino y Cornelio y toda su casa recibieron el Espíritu Santo (Hechos 10:30-48)
12) La iglesia en Antioquía: Ayunó y oró cuando enviaron hombres como misioneros (Hechos 13:1-4)
13) Pablo: Ayunó tres días antes de su conversión (Hechos 9:9). Ayunaba con frecuencia (1 Corintios 11:27)
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EL AYUNO SEGÚN LA BIBLIA, LO QUE DEBEMOS Y NO DEBEMOS HACER CUANDO AYUNAMOS
A continuación algunas pautas bíblicas a seguir las cuales harán más efectivo nuestro ayuno. Estas pautas serán tomadas de Isaías 58:3-12 y Mateo 6:16-18. Breves citas de cada una, en contexto, serán resaltadas. Solo breves comentarios pueden acompañar a cada una debido a la extensión del tema, pero puede seguir investigando por su propia cuenta cada punto mencionado.
Lo que no debemos hacer cuando ayunamos
1) Darse gusto en placeres y precisar toda su labor
Israel demandaba que los siervos trabajaran sin dejarles tiempo para orar, meditar o estudiar la palabra de Dios. Deje a un lado el placer y lo más que pueda de trabajo o negocio como le sea posible para obtener lo máximo del ayuno.
2) Ayunar para contender o debatir
Alabarse a sí mismo como el fariseo (Lucas 18:10-14), no es algo aceptable ante Dios
3) Herir con el puño inicuamente
Israel continuó en sus malas obras y maltrato a otros. El pecado debe ser erradicado de nuestras vidas para que el ayuno sea agradable a Dios. Esto se aplica a un santo que persiste en una conducta hipócrita. El ayuno puede ayudarle a conquistar debilidades en su vida.
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4) Tener una apariencia de tristeza
Mostrarse triste y provocar simpatía de otros destruye la efectividad del ayuno. En esto tenemos nuestra recompensa.
5) Desfigurar el rostro
Características faciales distorsionadas para mostrar a otros que usted está ayunando es incorrecto
6) Manifestar a los hombres que ayuna
Buscar impresionar a los hombres es el motivo incorrecto. Debemos buscar impresionar a Dios.
Lo que Sí debemos hacer cuando ayunamos
1) Desatar las ligaduras de impiedad
Desligarnos a nosotros mismos de lo que sea que estemos haciendo mal
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2) Saltar las cargas de opresión
Dejar a un lado no solo cargas físicas sino también las espirituales
3) Dejar ir libres a los quebrantados
Dar a los hombres libertad, perdonar sus transgresiones y ofensas y tratar a nuestros semejantes justamente.
4) Romper todo yugo
Dejar a un lado todo peso y el pecado que nos asedia, rompiendo todo yugo que nos ata y nos detiene de ser espirituales.
5) Compartir el pan con el hambriento
Dar pan literal y espiritual a un mundo hambriento
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6) Vestir al desnudo
Aplicaciones espirituales y naturales son consideradas aquí
7) No escondernos de nuestros propios hermanos
Restaurar la hermandad entre los santos así como también en los hogares y familias separadas.
8) Ungir la cabeza y lavarse el rostro
Esa era una costumbre judía, Jesús está diciendo que en los días que usted ayune, haga como en los otros días, no mostrando a otros que ayuna.
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9) No mostrar a los hombres que ayunamos
Aquí es importante ver y meditar también otros puntos donde se trata este tema en las escrituras
10) Ayunar a nuestro padre que está en secreto
Dejemos que nuestro ayuno sea a Dios, realizado discretamente, con una apariencia normal.
Este es el ayuno que Dios ha elegido
RESULTADOS Y RECOMPENSAS DEL AYUNO
Cuando participamos en el ayuno escogido de Dios podemos esperar resultados y recompensas. Un examen de Isaías 58:8-12), revela las siguientes 16 promesas y bendiciones que pueden ser nuestras si satisfacemos las cinco condiciones resumidas.
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PROMESAS SOBRE EL AYUNO
1) Nacerá tu luz como el alba
2) Tu salvación se dejará ver pronto
3) Tu justicia irá delante de ti
4) La gloria de Jehová será tu retaguardia
5) Entonces invocarás y te oirá Jehová
6) Clamarás y dirá él: Heme aquí
7) En las tinieblas nacerá tu luz
8) Tu oscuridad será como el medio día
9) Jehová te pastoreará siempre
10) En las sequías saciará tu alma
11) Dará vigor a tus huesos
12) Serás como huerto de riego
13) Serás como manantial de aguas, cuyas aguas nunca faltan
14) Las tuyos edificarán las ruinas antiguas
15) Levantarás los cimientos de muchas generaciones
16) Serás llamado reparador de portillos, restaurador de calzadas para habitar.
Condiciones para recibir las promesas del ayuno
1) Si quitares de en medio de ti el yugo
2) Si quitares el dedo amenazador
3) Si quitares el hablar vanidad
4) Si dieres tu pan al hambriento
5) Si saciares al alma afligida
Cada una de las promesas y condiciones tienen implicaciones espirituales, por lo tanto, es importante aplicarlas en el sentido espiritual
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LA DISCIPLINA DEL AYUNO SEGÚN LA BIBLIA
Aparentemente hay una estrecha correlación entre comer (Especialmente comer en exceso) y nuestro deseo de cosas materiales. En un ayuno extenso de tres días o más, hay una tremenda alteración de nuestros procesos de pensamiento, deseos físicos y ambición de adquirir posesiones materiales. Al regresar a una dieta normal todos estos deseos anteriores vienen impetuosamente sobre nosotros. ¡Hice algo que no debía!, es la primera sensación que uno siente; lo cual no es verdad. Le digo esto para reforzar la verdad de que nuestros apetitos naturales y las cosas espirituales van en contra la una de la otra. Solo esto debería impactarnos para ayunar.
Nuestro problema es una falta y no un exceso de ayuno
¡Qué vida de disciplina puede ser obtenida si regularmente conquistamos la permitida práctica legítima de comer! No podemos ayunar todo el tiempo, tampoco Dios espera que lo hagamos, pero nuestro problema es una falta, no un exceso de ayuno.
Parejas casadas, donde ambos son cristianos, deben estudiar 1 Corintios 7:1-5, conocer su significado y aplicarlo a sus vidas.
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Pudiéramos tener mucho más de todo lo que Dios nos ha prometido si disciplináramos nuestra carne a orar y ayunar. Ayunar, un principio práctico de la Biblia, ha sido casi abdicado por los círculos religiosos. Nuevamente le reto al mandato y concepto bíblico de ayunar.
ROMPIENDO UN AYUNO
Quizás una breve palabra de precaución estaría en orden. La mayoría de los eruditos en el tema del ayuno recomiendan tomar el mismo número de días que usted ayunó para regresar a una dieta normal. Después de ayunar tres días, tome tres días para regresar a una ingesta normal de alimentos. Cualquier ayuno debe cortarse definitivamente con comida liviana, jugos y frutas. Un sentido común santificado es la mejor regla para aplicar aquí.
Conclusión del estudio bíblico sobre el ayuno.
El ayuno es una enseñanza bíblica irrefutable. Levántese en el poder del Espíritu y de la disciplina física y siga el mandato de Dios. Haga un compromiso de ayunar hasta que el esposo regrese, entonces no tendremos que disciplinar más esta carne, pues ¡Tendremos un cuerpo nuevo!