El camino del amor, la expresión más sublime del cristiano
El amor todo lo sufre, lo cree, lo espera, lo soporta… El amor todo lo puede.
Hay tres elementos fundamentales que tienen que estar en la vida del cristiano: La fe, la esperanza y el amor, pero la Biblia dice que «el mayor de ellos es el amor«, por lo tanto, el camino del amor es lo más sublime que puede haber en el creyente, pues se puede hablar en lenguas humanas o angélicas, tener el don de profecía y todo conocimiento; sin embargo, si no se tiene amor, nada somos.
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El camino del amor: Un mensaje de amor, 1 Corintios 13:1-3, el camino más excelente
Es loable mencionar que el Espíritu de Dios iluminó al apóstol Pablo para que transfiriera a los Corintios y al mundo un escrito de amor sin comparación. Es importante resaltar que Pablo les escribe, a los hermanos de Corintios, un tema tan maravilloso que era de interés para la comunidad cristiana de ese tiempo como la de hoy en la actualidad, «el amor«.
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Es típico señalar que el mundo le ha dado otro sentido a esta expresión del amor, centrándolo en el sexo y en el acto sexual. Como también se hace uso cuando se quiere comunicar la simpatía que uno tiene por una determinada disciplina o actividad, por ejemplo: Cuando una persona dice «que ama la música» o «ama el deporte».
Por el contrario, es valioso mencionar que el amor que presenta Pablo aquí, tiene un origen divino y trasciende los significados terrenales. La mente humana no puede captar totalmente la profundidad de ese amor eterno. Dios ordena que todos los que le han reconocido le deben amar de todo corazón, alma y mente, y que también se debe amar al prójimo como a nosotros mismos.
Este amor del cual nos habla el apóstol Pablo está encerrado en la palabra griega ágape, que señala al amor que Dios tiene para con el hombre o el amor que el hombre tiene para con Dios.
Es trascendental indicar que el apóstol Pablo quiere que sus lectores vivan en el contexto del amor divino y que diariamente en su vida deben reflejar este amor. Mencionándoles que es necesario analizar los dones como son: El don de hablar en lenguas, de profecía, misterios, ciencia, fe y misericordia. Explicándoles que todos estos dones los pueden tener los creyentes, pero fuera del contexto del amor, todos estos dones no tienen sentido.
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El apóstol Pablo quiere que sus lectores comprendan el verdadero contexto del amor divino y que de manera sistemática muestren este amor a través de la práctica y vivencia. Les señala que este amor debe ser la forma de vida más excelente. Les invita que reciban y empleen sus dones espirituales en el contexto de ese amor.
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Requerimiento para el amor, el camino más excelente
Un himno al amor, el camino más excelente
Es interesante resaltar que, algunos escritores, señalan que el apóstol demostró una actitud rigurosa, fría, firme, sobria, pero a la verdad sus escritos reflejan lo contrario, ya que muestran a un hombre de emociones profundas, con verdaderos sentimientos, de amistades sinceras.
Un hombre desprovisto de compasión y y afectividad nunca hubiera podido ganarse la simpatía de muchos, tal como lo consiguió el apóstol Pablo, ni hubiera alcanzado componer el más asombroso himno al amor.
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Es significativo manifestar que, en los tres primeros versículos, el apóstol afirma que por parte de la iglesia de los corintios hay ausencia del amor y les señala que el cumplimiento de la ley es el amor.
Es bueno mencionar que el apóstol presenta la expresión del amor, no como un don espiritual, sino más bien lo demuestra como la gracia salvífica que mostró el Señor Jesucristo por la humanidad.
Es posible que, para la iglesia de los Corintios, los dones más preciados para ellos era el de hablar en lenguas, el de interpretación de lenguas y el de profecía, es por esta razón que el apóstol Pablo les exhorta y les expresa que el amor en la vida del creyente es absolutamente indispensable y de nada les servirá estas manifestaciones.
Sin el verdadero amor la vida del cristiano se vuelve estéril
Es relevante mencionar que Pablo les hace ver a los Corintios que ellos pueden poseer muchos dones espirituales, expresándoles que, aunque fueran tan piadosos como para dar todos los bienes a los necesitados, y aunque entregaran sus cuerpos como mártires de la verdad, y este fuese quemado, a no ser que fueran movidos por el verdadero amor, no alcanzarían ninguna recompensa.
Pablo les remarca que el amor en la vida cristiana es definitivamente necesario, sin él ningún don se puede ejercitar en forma adecuada, ninguna aptitud se puede utilizar debidamente. Sin el verdadero amor la vida cristiana se vuelve estéril o improductiva.
La naturaleza del amor, 1 Corintios 13:4-7
El amor todo lo sufre, todo lo cree, todo lo espera, todo lo soporta, el amor nunca deja de ser
Pablo en estos versículos, del 4-7, presenta quince características relacionadas con el amor, no intenta definirlo o analizarlo, ni describirlo; lo que señala es que este amor se debe reflejar a través de la acción o actitud que debe mostrar el creyente, explicando las formas en que este se manifiesta.
Sin amor la vida del creyente se vuelve infructuosa
Lo que le preocupa a Pablo es el estado de la iglesia de los Corintios, la cual estaba perturbada y dividida por la forma en que estaban haciendo uso de los dones espirituales considerando que hacían lo correcto. Es por esta razón que el escritor sagrado les exhorta fuertemente, señalándoles que sin amor sus vidas se vuelven infructuosas.
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Es interesante manifestar que el apóstol Pablo hace uso de ciertas expresiones o características del amor que vamos a mencionar a continuación.
Características del amor, según 1 Corintios 13, el camino más excelente
El amor es sufrido, es paciente
La Biblia dice que el amor es paciente. Se debe tener en cuenta que la palabra paciencia viene del griego makrothymein y que describe la paciencia con las personas y no con las situaciones. En otras palabras, les dice que ser paciente equivale a ser tolerantes, no alimentar resentimiento alguno, estar en la capacidad de perdonar a los demás; ser conscientes de que la paciencia no es una señal de debilidad, sino de fuerza; no es derrotismo, sino el único camino al triunfo.
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El amor es benigno
Cuando se dice que el amor es benigno, la palabra benigno viene del griego jresteúomai, este término no significa ser pasivo, sino mas bien activo, es estar dispuesto a servir. Pablo les señala a los corintios que si ellos son buenos, esto se va a manifestar en el bien que le puedan hacer a otros, y que para ayudar a alguien no van a dejarlo para otro instante, pudiéndolo hacer en el momento que lo necesita la persona.
El amor no tiene envidia
Pablo dice que el amor no tiene envidia y es posible que entre la iglesia de los corintios hubiera esta dificultad. Es por esta razón que Pablo les manifiesta que si en alguna circunstancia habían hermanos que los superaran no debían irritarse, ni sentirse angustiados, recordándoles que la envidia es lo opuesto al amor.
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El amor no es jactancioso
Cuando Pablo dice que el amor no es jactancioso, hace uso de un verbo que describe a una persona que es jactanciosa, individuo que hace gala de su retórica para conseguir reconocimiento. Esta conducta está marcada por el egoísmo. Una persona en esta condición va a mostrar su orgullo de sí mismo y de sus logros, pero tal pompa carece de amor a Dios y al prójimo.
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El amor no se envanece, no es arrogante
Pablo aconseja a los corintios que deben actuar conforme a las escrituras, porque solo así podrán evitar la arrogancia; ya que algunos de los corintios estaban en esa condición, y pensando que Pablo no regresaría, minaban su autoridad; además, los corrige diciendo: El conocimiento envanece, pero el amor edifica (1 Corintios 8:1).
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El apóstol Pablo trata de hacerle comprender a la iglesia de los Corintios que es imposible vivir una vida cristiana sin el verdadero amor, es por esta razón que les señala que deben evitar de practicar actitudes que no van a ayudar en el desarrollo de su vida espiritual, manifestando que el amor no se comporta indecentemente, no busca lo suyo, no se irrita, no guarda un registro de los agravios recibidos.
El amor no hace nada indebido, no se comporta indecentemente
Pablo le expresa a los hermanos que cuando hay este tipo de comportamiento no se está en armonía con las normas establecidas de la decencia. La persona que demuestra amor siempre procura guardar decoro en relación a los demás. Recordándoles que una conducta decente va más allá de las palabras y la actitud.
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El amor no busca lo suyo
Es significativo que Palo les dice a los Corintios que el amor no busca lo suyo, que es desprendido por excelencia. No es verdadero amor cuando se insiste siempre en nuestros derechos. El amor se abstiene de exigir preferencia, reconocimiento, aplauso, incluso la consideración que con razón se puede esperar; cuando se hace esto cada día nos alejamos del verdadero amor.
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El amor no se irrita
Es loable mencionar que Pablo dice que, cuando hay un verdadero amor, este no permite que la vida del creyente no se inflame, no se ponga furioso, pues el amor no se irrita. La irritación es siempre una señal de derrota y cuando se pierde el control se pierde todo.
El amor no guarda rencor: No almacena recuerdos de ofensas recibidas
Es propio señalar que la palabra guardar o almacenar viene del griego loguízesthai, un término de contabilidad, y se usa para archivar algo para que no se olvide. Pablo invita a la iglesia a no abrigar en sus vidas rencores, ofensas, y otros elementos que puede afectar a su relación con Dios.
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El amor nunca deja de ser: La inmortalidad del amor
El amor nunca deja de ser, pero las profecías, lenguas y ciencia acabarán
El amor nunca deja de ser pero las profecías acabarán
Es meritorio indicar que Pablo hace uso del verbo griego katargein, que se traduce en desechar, cesar o pasar, señalando que el verdadero amor nunca deja de ser, pero las profecías se acabarán; no porque sean falsas o equivocadas, sino porque todas habrán tenido un cumplimiento perfecto, mientras que el amor es eterno, el amor nunca deja de ser, las profecías predictivas son transitorias; el amor permanece activo, pero las profecías tienen una importancia parcial. El apóstol Pablo no dice nada acerca del contenido de estas profecías, excepto que tienen un carácter pasajero o temporal.
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El amor nunca deja de ser, pero cesarán las lenguas
Las lenguas cesarán, pero no el amor. El propósito de este don de lenguas, que era el más deseado de los hermanos de corintios, era solo el de producir un efecto pasajero y servir de ayuda en la formación de la iglesia primitiva.
El amor nunca deja de ser, pero la ciencia acabará
El conocimiento terminará, porque el amor nunca deja de ser, pero la ciencia acabará. Pablo no explica el significado de ciencia o conocimiento; pero sí, en el capítulo anterior mencionó el don de conocimiento (1 Corintios 12:8), donde se refiere a una afinidad entre Dios y su pueblo.
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Es importante describir que el escritor sagrado menciona que el conocimiento tiene que ver con nuestra aptitud para comprender e interpretar la revelación de Dios, recordándoles que estos dones y talentos habían sido otorgados para el fortalecimiento y dirección de la iglesia. Haciendo énfasis que el amor es eterno, el amor nunca deja de ser, y jamás pierde su validez. Todo lo demás que es parte de la creación de Dios se termina, pero el amor continúa activo e influyente.
En parte conocemos y en parte profetizamos, pero el camino del amor es el camino más excelente
Pablo dice que el conocimiento y la profecía, que se revelaba en la iglesia de los corintios, se distribuye para beneficio de los creyentes, estas dos expresiones apuntan a la predicación, la enseñanza y la explicación de la voluntad de Dios tal como se revela en la Escritura. El apóstol parece indicar que la actividad de conocer la verdad de Dios y de profetizarla se lleva a cabo en una forma separada. Esto significa que el conocimiento y el profetizar son incompletos.
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Es admirable que el escritor sagrado introduce en su himno al amor una estrofa doble. Para dejar bien claro lo que quiere decir en cuanto a esos dones que desaparecerán, Pablo utiliza dos comparaciones: El conocimiento del niño y el reflejo del espejo.
Es propio mencionar que el ser humano normal crece, progresa, se desarrolla. Estos cambios los experimentó el apóstol Pablo hasta que llegó a ser un hombre, formando una imagen vívida de la cesación del conocimiento. Remarcando que lo temporal dejará de ser, pero «el amor nunca deja de ser«.
Ahora vemos por espejo
Es notable valorar como el apóstol Pablo presenta una analogía, comunicando la idea de algo incompleto, añade una ilustración tomada de la vida diaria: El mirarse al espejo. Indica que la vida de los creyentes es similar a personas que en un espejo ven la imagen indefinida de sí mismos.
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Tomando en cuenta que en el tiempo de Pablo un espejo era un pedazo de metal pulido que con frecuencia se colocaba en una mesa. La imagen que este plato metálico reproducía no era comparable con la realidad. Los espejos eran instrumentos imperfectos. No obstante, una persona no podía verse a sí misma sin la ayuda de un espejo.
Por otro lado, el dicho «ver en un espejo una imagen indefinida» podría haber sido una conocida metáfora que los filósofos usaban para referirse a algo enigmático.
Los corintios conocían bien los espejos y sus reflejos engañadores. La antigua ciudad, de hecho, era famosa por sus espejos, instrumentos muy elaborados hechos de metal pulimentado. Pero incluso sus reflejos mas fieles eran confusos y turbios en comparación con la visión directa del ojo.
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Por tal razón, el apóstol Pablo expresa «ahora conocemos en parte; pero entonces conoceré como fui conocido«. Expresando que el conocimiento que se obtenía era parcial y que iba a desaparecer; pero el amor nunca deja de ser.
Ahora permanecen la fe, la esperanza y el amor; pero el mayor de ellos es el amor
El amor es superior, porque Dios es amor
Es loable resaltar que Pablo pone broche de oro a su exquisito himno expresando que el mayor de ellos es el amor. Pablo afirma que las tres cosas permanecerán y que no obstante el amor siempre será superior a los demás.
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El amor es el propósito final de las demás cosas mencionadas por Pablo, su cumplimiento total, su meta más elevada, su objetivo último. El amor es el fruto más hermoso de la fe; es el bien mayor que la esperanza prevé.
La fe y la esperanza nos sitúan en una relación justa con Dios, mientras que el amor constituye su misma esencia. Dios no cree; Dios no espera; ama. El amor es superior a todo por la simple razón de que Dios es amor.
El camino del amor, conclusión
Pablo menciona tres virtudes: Fe, esperanza y amor; pero ensalza al amor como la más grande
Es significativo destacar que Pablo dedica todo un capítulo al tema del amor. Cumpliendo su promesa de indicarles a sus lectores un camino más excelente. Expresando que el amor es la virtud más importante que un creyente puede adquirir y aplicar. Pablo menciona una lista como el don de lenguas, profecía, ciencia, fe, beneficencia (Dar dinero a los pobres) y sacrificio físico (entregar el cuerpo al fuego); pero sin el amor estos dones no son nada.
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Pablo describe el amor en forma positiva como paciente y bondadoso, pero después nos dice lo que NO es el amor. El amor no es celoso, ni jactancioso. No es orgulloso, rudo, egoísta e iracundo; no guarda resentimiento, ni se goza en el mal. Protege la verdad, confía, espera y persevera. Nunca falla.
Aunque el amor es eterno, los dones de profecía, lenguas y conocimiento son transitorios y serán desechados. Pablo usa ejemplos sacados de la vida diaria: Las palabras, pensamientos y razones de un niño son comparados con los de un adulto.
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Pablo también usa el ejemplo de la imagen que se proyecta en un espejo, comparada con el ver a alguien cara a cara. Pablo concluye con las tres virtudes de: Fe, esperanza y el amor; pero ensalza al amor como la más grande de todas.